Los Encuentros de David de Alba
con las Leyendas Olga y Tony

  Olga Chorens y Tony Alvarez eran los queridos cantantes cubanos de ese entonces, una pareja casada que cantaba con sus corazones como modo de ganarse la vida y que fueron nombrados cariñosamente en el mundo artístico "La Pareja Ideal".   También fueron premiados con el título / trofeos de "Mr. and Mrs. Televisión 1955."   La primera vez que los ví fué en su famoso show de televisión de la CMQ durante el día y también en su espacio nocturno.   También los oía cantar por su show aclamado de Radio Progreso por las noches.   Una vez vinieron a Camagüey con su orquesta para dar un concierto una noche en El Teatro Principal.   Después del show los conocí por primera vez en persona entre bastidores.   Lucían radiantes, como el Príncipe y la Princesa Azul de una película de Walt Disney y fueron muy atentos con todos sus fans los que les estaban felicitando por sus actuaciones de esa noche.   Todavía puedo sentir el amor que el público les demostraba esa noche a ellos.

Como mi abuelo y padre trabajaban para los ferrocarriles de Cuba, mis padres me llevaban una vez al año a la capital de Cuba, La Habana, donde Olga y Tony vivían y cantaban.   Yo los veía en la televisión y en la radio desde mi pueblo en Camagüey, pero una vez ya en La Habana, lo mejor de todo el viaje fué que los pude ver actuar nuevamente en persona y visitarlos después del show.   (Aquí pueden ver una foto tomada por mi tía Fé de una joven Olga de pelo negro y yo afuera de la CMQ después de su show.)   Yo recuerdo que Olga estaba quejándose con nosotros que su cabellera no le lucía bien después de su parto de su segunda hija Olguita, que se le estaba cayendo un poco y que tuvo que cortarse el pelo más corto por ello.   (Olga era conocida por tener una de las más lindas cabelleras al igual que otra cantante cubana, la bonita rubia Alba Marina.)   Mis padres me llevaron a una tiendecita que Olga y Tony tenían y que estaba en una sección llamada "La Rampa" cerca de la CMQ.   En esa tiendecita ellos vendían muchas cosas relacionadas con ellos como sus discos, el muñeco/muñeca Olga y Tony, etc..   Llegamos antes que Olga entrara y cuando ella me vió por segunda vez me saludó y como cortesía a mí después que mis padres me compraron un disco de 45 rpm de su nueva grabación de Navidad "Felices Navidades", me cantó esa canción sobre su voz ya grabada en el disco.

Todavía recuerdo que Olga y Tony también trabajaron en otra estación de televisión el Canal #7.    Una noche Olga tenía laringitis y aunque ella siempre cantaba con Tony en vivo con su orquesta, esta ves ella se disculpó con el público del estudio porque tuvo que doblar su voz a su grabación de "Tengo una Debilidad."   Esa noche también tenían un juego en una parte de su show en que unos niños de la audiencia participaron y yo fuí seleccionado también.   Tony tenía un cigarrillo de mentira en su boca el cuál estaba amarrado a un hilo que lo aguantaba del techo y yo tenía que dispararle con un revólver de mentira tirarle y quitárselo de la boca mientras que un ayudante en el estudio, en el momento apropiado de ese tiro por mí se lo quitaba de su boca halándolo.   Yo me gané un premio chico por ello.   ¡Qué tiempos tan simples aquellos eran!   En otra ocasión los oí cantar en una estación de radio llamada: "Radio Cadena Azul" cerca de esa cadena de televisión.   Cada año en las Navidades iba a La Habana para visitar a varios miembros de mi familia y para ver a mis ídolos Olga y Tony y para también comer esos buenos postres que eran parte de sus comerciales de la televisión de "La Gran Vía" que solamente se podían encontrar y comprar en La Habana.   ¡Qué premio tan bueno era éso para mí!   ¡Todavía puedo sentir en mi boca el sabor de esos divinos cakes y pasteles!

Una vez fueron mi Abuela María y mi Tía Consuelo de Camagüey a La Habana para encontrarse con su otra hermana Catuca, la cuál vivía allí para ir como invitadas especiales en el Show de Olga y Tony de la CMQ.   Ellas fueron fotografiadas por las cámaras mientras estaban sentadas en tres sillas en el escenario mientras Olga y Tony les hablaban y les cantaban una canción directamente a ellas.   Estábamos tan contentos viéndolas a ellas desde nuestra casa en Camagüey en nuestro nuevo televisor RCA Victor en blanco y negro de 21 pulgadas.   (Esa era la más grande pantalla que existía en ese entonces.)

Olga y Tony trataban de complacer a su público cuando les pedían ciertas canciones que cantaran y siempre el nombre de esa persona era mencionado después que él o ella la cantaba.   También recuerdo que cuando ellos abrían su show con su tema "Cantemos Siempre Cantemos" Tony le preguntaba al público "¿Cómo están Uds.?   Y cuando ellos replicaban "Bien" Tony les decía "¿Bien?"   Entonces el público con más fuerza gritaba "¡BIEEEN!"   Entonces Tony le decía al público en el estudio "Lo demás no importa!   Recuerdo que una vez una vieja dama siempre muy bien vestida y peinada que asistía a sus shows de la televisión de la CMQ diariamente (cuyo nombre se me ha olvidado) estaba ausente ese día, y cuando Tony le preguntó al público como siempre hacía "¿Cómo están Uds.?   y el público exclamó: "¡BIEEEN!"   Tony dijo entonces "Hoy no está bien, lo demás sí importa" mientras uno de los camarógrafos enfocaba el asiento vacío en la audiencia...Uds. ven, esa Sra. acababa de morir y Olga y Tony estaban tristes mientras hablaban sobre ella cariñosamente y de como la iban a echar de menos.   Ellos siempre supieron valorar el cariño y la lealdad de sus admiradores.   Así mismo ocurría con Judy Garland la cuál tenía gran aprecio y un cariño genuino hacia su público.

El Show de Olga y Tony era un show muy fino y familiar y muchos niños iban a verlos cantar al igual que jovencitos y muchos adultos también.   Olga y Tony hasta leían cartas de sus fans y también enseñaban hasta las fotografías de muchos niños y de otros fans ya mayores.   Pero aún con todo eso su show no era superficial.   Acompañados por una orquesta magnífica no solamente ellos cantaban canciones infantiles como "El Ratoncito Miguel", "Sonríete Niña", "El Alacrán" y "La Marcha de las Letras", etc., pero también tenían un repertorio muy internacional el cuál ellos adquirieron en sus giras artísticas especialmente cuando fueron por Sur América.   Olga también cantaba canciones sobre mujeres muy ligeras como "Yo Soy Esa", "La Piba de mi Barrio" y "Zapaticos de Charol."   Bastante fuerte eran esas canciones para los menores, pero eran cantadas de tan buena forma y con tal cautela por ella que realmente era una educación para las audiencias cubanas para indicarles que habían todo tipo diferentes de personas en el mundo que eran también representadas en su gran repertorio.   Olga es una cantante tan espectacular.   Ella tiene una de las mejores voces que yo he oído.   ¡Su perfecta dicción y expresión de las líricas al conjunto de la forma que su cuerpo expresa al cantar hace que cada canción coja vida propia!   Tony también era más que un buen cantante pero también era un consumado músico, compositor, arreglista y se ocupaba de llevar a cabo todo lo relacionado para el mejoramiento y encabezamiento de la parte del negocio de sus carreras artísticas.

Los fans de Olga y Tony recordarán bien tales canciones como: "El Cha-Cha-Chá del Tren", "Ropa Blanca", "Mi Ranchito", "Linda Caleñita", "Chinito, Chinita" y "Arrivederci Roma" las cuáles eran cantadas en dúo; "Las Caderas de Sofía", "Antonio Tiene una Orquesta" y "Los Ejes de mi Carreta" que eran algunos de los hits de Tony y muchos hits de Olga como: "Qué Motivo", "Te Adoraré", "Regalo de Viaje", "Estrellita del Sur", "La Virgen de la Macarena" (la original canción clásica española), "Yo Soy Esa", "La Leyenda del Beso" y "Cuanto lo Siento", etc. y tantas canciones preciosas de la bella isla de Puerto Rico como "Capullito de Alelí", "Ahora Seremos Felices" y "Campanitas de Cristal"; algunas congas de Cuba como "Sun-Sun-Babaé" también esos lindos valses peruanos..... y por supuesto esos bellos tangos de la Argentina que ellos también cantaban, tangos inmortalizados por los inolvidables Carlos Gardel y Libertad Lamarque.

Recuerdo que todos los días durante el tiempo libre entre las horas de la escuela al mediodía, yo llamaba a mi Abuela María, mi Tía Consuelo, a mi Abuelo Francisco y a nuestra querida sirvienta que vivía con nosotros Graciela para que vieran el show de ellos conmigo como algo ritual.   Mis padres estaban ausentes casi todos esos momentos ya que ellos estaban ocupados en sus respectivos trabajos.

Bueno, todos esos días divinos de mi vida se acabaron cuando Fidel Castro tomó poder y yo tuve que dejar a Cuba dejando detrás todas mis pertenencias.   Mis padres también se fueron más tarde y le siguieron después mi Abuela María, mi Abuelo Francisco y mi Tía Consuelo.   Muchos miles de cubanos se fueron del país y por supuesto Olga y Tony también.....muchos años pasaron, los cuáles yo esquivaré aquí para hacer esta historia un poco más corta.

Al principio de los años 1970, cuando estábamos viviendo en San Francisco, California descubrí que el TV Show de Olga y Tony de la cadena Telemundo de Puerto Rico, donde ellos y con sus dos hijas Lissette y Olguita también residían y trabajaban,se estaba pasando al aire por el área de San Francisco, California y por el resto de los Estados Unidos.   Ví por primera vez en mi vida la imagen de una Olga con cabellos claros muy dorados cantar y a Tony luciendo tan apuesto como siempre y los dos lucían casi igual que la última vez que los ví.   Yo grabé muchas de esas apariciones de ellos de la televisión.   (Pasaron muchos años y cuando Tony se enteró de eso él me pidió que le mandara esas cintas de video ya que él nunca había vistos esos programas y quería enseñárselos a su familia y amistades y quizás usar una de esas escenas para un proyecto de televisión o para un video en un futuro no lejano.)   Yo los llamé a Puerto Rico en ese entonces varias veces, una vez a Telemundo y después a su casa (ya que fueron tan gentiles de darme su número privado).   Más años pasaron..........

En 1979, Olga y Tony ya se habían mudado de Puerto Rico a Miami, Florida y abrieron con una nueva revista musical concentrada sobre su acto de dúo en el conocido "The Everglades Hotel."   En ese entonces, yo estaba radicado en San Francisco, California, y viajé a Florida para poderlos ver después de tantos años de ausencia y revivir esos gloriosos tiempos de Cuba antes de Castro.   Traje conmigo a mi compañero Paul para que los viera esta vez en persona y así pudiera apreciar y comprender el porqué todos esos elogios míos para ellos de su bella forma de cantar y el porqué yo los quería tanto, etc..   Ahí estaba yo de nuevo otra vez con mis ídolos/cantantes en persona una vez más.   Después del show me presenté a Olga detrás del escenario y le enseñé a ella la foto mía tomada en la CMQ con ella cuando niño.   Algo le sonó en su memoria ya que ella llamó a Tony y le dijo: "Oye Chinito, este era el niño que nos venía a ver en Cuba a cantar y quién nos llamaba a Puerto Rico."   "Sí, ahora si sabemos quién eres tú, David."   Era increíble que pudieran recordarme ya que ellos habían visto a tantos pero tantos niños en su carrera.   Bueno tuve la suerte ya que cuando ellos supieron por mí que yo era un cantante/imitador que trabajaba en una revista musical de transformistas en el mundialmente famoso Finocchio Club de San Francisco, California, ellos me pidieron que por seguro yo les cantara la próxima noche para ellos en su show.   Yo había traído tres arreglos musicales en caso que algo como eso ocurriera, pero no traje ningunos de mis trajes teatrales de transformista, por lo cuál tuve que cantar vestido en mi traje usual de varón, lo cuál fué algo diferente y hasta raro para mí hacer en escena.   Yo les dije que cuando yo retornara a Miami el año entrante traería un vestuario adecuado para usar en escena si ellos así lo querían.   Ellos me replicaron con entusiasmo que sí que lo hiciera y yo por supuesto así lo hice.   ¡Uds. pueden imaginarse lo afortunado que yo me sentí cuando al presentarme, mis ídolos cantantes de Cuba, Olga y Tony le dijeran a su público que yo imitaba a Olga en unos de mis actos, y que ellos se sentaran en la primera fila para oírme cantar y aplaudirme con cariño de familia y decirle a todas las personas del público que yo era ese chico que iba a verlos a cantar a sus shows en Cuba !   Yo nunca esperé que eso ocurriera en mi vida y por ello quedé muy agradecido a Dios y a ellos.

Por la mañana al otro día Olga y yo fuimos a diferentes lugares desde a una fábrica de ropa hasta a una cafetería pequeña cubana que a ella le gustaba y donde ella conocía a los dueños.   Ella me invitó allí un desayuno para tomar un café con leche cubano y tostadas con mantequilla.   También fuimos a visitar la versión nueva de la repostería de Miami de La Gran Vía de Cuba (de esos famosos postres de Cuba que yo adoraba).   Depués Olga y yo hablamos sobre muchas cosas interesantes fuera de asuntos de La Farándula, sobre La Vida, diferentes formas de vivir de muchas personas y culturas, sobre los Platillos Voladores que muchos en Puerto Rico habían visto y que yo había visto también en California, etc..   Olga también manejó para llevarme a visitar a su famosa hija Lissette la cuál estaba en estado al momento y no se sentía bien cuando Olga me la presentó.   No nos quedamos mucho rato ahí.   No importa adonde fuéramos, Olga era reconocida siempre aunque llevaba anteojos oscuros.   Pero ella ponía el foco de atención en mi persona elogiándome a mí y mi acto cada vez que me presentaba a sus admiradores.   ¡Qué linda y sencilla ella era y es!   Tony se encargó de los gastos de la suite que mi compañero Paul y yo ocupamos en The Everglades Hotel como una cortesía hacia mí mi por haber sido su artista invitado en su show.

Más tarde cuando los visité a ellos en su apartamento en el hotel, Tony me dijo que tenía una sorpresa para mí.   El me dijo que cantara con mi voz sobre una cinta en la cuál ellos habían grabado ya sus voces cantando su tema "Cantemos Siempre Cantemos" para que yo me la llevara de recuerdo para mi hogar en California de los tres cantando ese tema juntos.   El también me dijo que cantara con sus pistas musicales de "La Virgen de la Macarena" y "Ahora Seremos Felices" esa noche en el show.   Yo incorporé esas pistas a los arreglos musicales que yo ya traía conmigo anteriormente de California para que los músicos esa noche en el nightclub me acompañasen.   Olga le decía a Tony a menudo después que yo cantaba: "Chinito, David canta con mi mismo estilo y manerismos y sabe más sobre Olga Chorens que yo misma conozco sobre mí."   Yo le dije entonces a ella: "Yo tengo que saber más sobre tu persona que quizás tú misma y sobre las otras mujeres que yo imito en el escenario si yo espero hacer creíbles mis caracterizaciones a mi público."

Les contaré una historia graciosa que nunca olvidaré.   Un día, mi compañero Paul y yo y Olga y Tony fuimos manejando hasta Boca Ratón en nuestro carro de alquiler para ver algunas casas que estaban en venta.   Paul y yo queríamos hacer La Florida nuestro hogar en un futuro cuando nos retiráramos.   Hicimos una conexión con un agente americano de bienes y raíces que no tenía la menor idea de quiénes eran Olga y Tony.   No bien llegamos a la primera casa que nos iban a mostrar, y se armó un pandemonio.   Los propietarios eran un matrimonio cubano y la dueña de la casa reconoció a Olga y Tony en cuanto los vió entrar. Toda alborotada, la señora se deshizo en atenciones con ellos;   les dijo cuanto los quería y que había admirado sus voces desde Cuba;   les ofreció un flan que acababa de hacer y no paraba de hablarles.    La Sra. pensó que quizás Olga y Tony iban a ser los compradores de su casa y esa Sra. no podía creer lo que sus ojos estaban viendo en esos momentos.   Yo le expliqué al agente americano de casas que ellos eran una famosa pareja de cantantes de Cuba para que él comprendiera todo ese alboroto.   El quedó impresionado por lo ocurrido.   Otra cosa grata que ocurrió también fué que más tarde Olga y yo cantamos juntos en el carro algunos de sus hits.   Ella hasta me explicó como hizo una de sus grabaciones, la canción "Regalo de Viaje" en el estudio en Cuba, etc..   Mientras tanto Tony nos miraba con agrado al ver el buen tiempo que su esposa y yo estábamos pasando, sobre todo al realizar que ese muchacho era un gran admirador de ella desde chico y que la imitaba en escena como parte de su acto hoy en día.   Más tarde en esa semana Paul y yo llevamos a Olga y Tony por la noche como nuestros invitados de honor para ver en Miami Beach en un hotel precioso (se me olvidó el nombre ahora) una nueva revista de tranformistas muy acogida por el público.   (Esa fué la noche que Olga y Tony no estaban cantando en su propio show) y a ellos le gustó el show, pero Tony me dijo sutilmente al oído que a él le gustaba mi acto más porque yo cantaba con mi propia voz y no doblaba con discos como todos los artistas de ese show hicieron.   Pienso que eso fué muy gentil de Tony en decírmelo ya que él era un perfeccionista en todo lo que se aplicaba a La Farándula.

Olga y Tony fueron muy buenos conmigo siempre porque de vez en cuando ellos me mandaban cintas de audio con algunas de sus pistas musicales (sin sus voces) para que cuando yo hiciera conciertos en tributo a su música (fuera de mi show de Finocchio's) yo pudiera lucirme más con mi voz con esos arreglos magníficos de ellos.   Ellos apreciaban no solamente que yo era un fan leal de ellos como otros muchos más de sus fans por ahí, pero por mi inclinación artística y mi tributo de cariño en canción para ellos y especialmente para Olga.   ¡Qué artistas con tanta clase son ellos! Por estoy escribiendo acerca de ellos ahora, no para glorificarme artísticamente ante Uds. con alabanzas, pero para dejar saber a otros el porqué estos legendarios artistas han tenido tan gran significado para mí a través de los años.

 La última vez que trabajé con ellos fué cuando estaban bajo contrato en el bello Hotel Monte Carlo de Miami Beach.   Yo estaba programado a cantar dos noches como artista invitado de honor en su revista musical, pero la tercera noche Olga me llamó al motel donde estaba hospedado en Miami Beach para decirme que le dolía la garganta esa noche y que si yo quería reemplazarla y hacer otra aparición especial.   Fué muy grato y un honor para mí que ella me lo pidiera de ese modo y más aún todavía cuando esa noche Tony al introducirme al público les dijo: "David de Alba es lo mejor en escena después que mi esposa ya que él va a llenar su espacio esta noche para cantar porque ella no se siente bien."   Yo sé que los fans de Olga estarían decepcionados al principio cuando oyeron que Olga no estaba esa noche allí para cantarles, pero sí me aplaudieron con cariño después de ver mi interpretación cariñosa de tributo para Olga.   Mucho tiempo pasó sin verlos pero entre llamadas telefónicas y postales de Navidades seguimos en contacto por más años.

En los años 90 durante El Show de Olga y Tony en el Hit TV en Miami, Tony me pidió que le mandara un video mío con escenas de conciertos filmadas en el área de San Francisco.   El puso con mucho gusto con su manera única de editar muchas de mis escenas cantando juntas en un video especialmente para presentrame en su show de TV y al mismo tiempo con algunas de mis fotografías de publicidad, él me introdujo al aire a su público televidente.   Más tarde, en ese año en su show de Radio Mambí, Olga y Tony hablaron sobre mí, mis shows, como mi voz sonaba igual que una mujer al cantar, mi vieja devoción hacia ellos, etc..   Eso fué muy gentil de ellos en hacerlo y una sorpresa grata para mí también cuando Tony me mandó un cassette con la grabación de ese show ya que él sabía que yo no podía coger esa estación de radio en California.   Tony fué muy bueno también en mandarme algunos videocassettes de sus programas de televisión de Miami porque él sabía que yo no podía coger esa estación de televisión tampoco en California.   Luego me mandó otros videos de recuerdo de sus viejos shows de la televisión de la CMQ de Cuba los cuáles él obtuvo gracias a un fan que se fué de Cuba y que pudo rescatar algunos de esos shows de ellos de ese entonces y se los trajo de regalo a Miami.   ¡Gracias a Dios por kinescope en ese entonces y por ese fan!

 En el año 2,000 Paul y yo retornamos a La Florida después de muchos años de ausencia y yo pude ver a Olga por breves momentos en su show de Radio Mambí ya que yo tenía que coger un avión esa misma tarde y estaba apresurado con mi corto tiempo para no perder el vuelo.   Olga estaba muy triste y lucía cansada ya que Tony estaba muy enfermo y los doctores le habían dicho que le quedaba poco tiempo de vida.   Por cierto el tiempo ya estaba cerrando un capítulo en la etapa de ese gran dúo musical.   Era muy difícil para Olga tener el peso del show sobre sus hombros sola sin Tony y también llevar la responsabilidad de llevar a cabo la parte técnica de la producción sin la ayuda de su compañero de tantos años.   Ella se ocupó de Tony durante su enfermedad en su casa hasta su final como la gran esposa que era.   Yo le dije a ella cuanto yo sentía sobre la enfermedad de Tony y que había venido a despedirme de ella y de muchos miembros de mi familia ya que yo no esperaba volver a La Florida otra vez en mi vida.   Ella me dijo: "¡Tú no debes de seguir diciéndome esas cosas o me vas hacer llorar!"   Lágrimas se empezaron a formar en sus bellos ojos verdes como dos esmeraldas.   Le dije a ella antes de irme: "Tú todavía eres mi muñeca."   Siendo la persona modesta que es ella me miró dulcemente y me dijo mirándome directamente hacia mí como una niña: "¿Una muñeca David, después de tantos años?"

Antes que Tony muriera ellos recibieron muchos tributos en el área de Miami, especialmente recibiendo su estrella incluída en "La Calle Ocho Walk of Fame", la versión de Miami de la otra famosa de Hollywood, California para los artistas latinos.   En Octubre del 2008 (muchos años después del fallecimiento de Tony) una calle en Miami fué nombrada "Olga y Tony Avenue".

Todavía recuerdo una cosa más sobre lo cordiales y cariñosos que son Olga y Tony.   Un domingo en la tarde los llamé a su casa para saludarlos y apenas había hablado unas palabras con Olga cuando ella me dijo de pronto: "¿David, porqué no me cantas unas estrofas de La Virgen de la Macarena para que también Tony te oiga?", (esta es la canción que ella le dió fama en Cuba.)   "Yo quiero oír como tu voz suena cantando actualmente".   Ella me dijo que iba a ponerme por medio de una bocina telefónica para que Tony me pudiera oír también.   Yo le canté un poquito y entonces tan dulce y gentil como siempre le dijo a Tony: "Tony, todavía David la puede cantar!"